Autoridades defienden labor de Mesa Caribe, pese a críticas de sectores
"Es hora de actuar, de poner en marcha acciones concretas para garantizar la viabilidad de proyectos que harán que la provincia avance hacía la reactivación económica".
Así describió el presidente de la República, Carlos Alvarado, el decreto que creaba la Mesa Caribe, el 17 de febrero de 2019.
La medida llegó como una solución ante la situación social y económica que enfrentaba la provincia a raíz de la ola de desempleos relacionados con la entrada de operaciones de la Terminal de Contenedores de Moín (TCM).
"No ha sido sustancial (la Mesa Caribe) si uno se pone a ver, son proyectos que ya venían, se mencionan como para decir que 'estamos haciendo algo'. La pregunta es, le quedan dos años al gobierno: ¿En dos años van a salir?, y si viene otro gobierno, qué va pasar, queda la incertidumbre", comentó en 2020, Javier Román, obispo de Limón.
Sin embargo, pese a la críticas de los sectores, el Gobierno de la República defiende la labor realizada a través de esta iniciativa.
"Un legado importante de la Mesa Caribe, es haber logrado cambios en la paz social, mediante el diálogo entre todas las partes, aquí no hubo imposiciones, fue un espacio propositivo rico en ideas, que se hizo en paz; a pesar de las diferencias, la pobreza y las desigualdades, fuimos capaces -desde el 2019- de generar cambios.
"Más allá de cualquier gobierno, dependerá de los liderazgos de los propios limonenses para que la Mesa Caribe perdure en el tiempo", manifestó Marvin Rodríguez, vicepresidente y coordinador de la mesa.
Por medio de un comunicado de prensa, Casa Presidencia, asegura que el eje de seguridad humana de la Mesa Caribe logró la reducción de desigualdades e inequidades.
Según las autoridades, en este aspecto se invirtieron ₡298,406 millones.
Solo en atención a las familias en situación de pobreza del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) invirtió ₡145,460 millones alcanzando un total de 60,979 hogares limonenses en dicho período, asegura el gobierno.
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