Costa Rica y Francia refuerzan la vigilancia del Caribe
- Martin Montoya
- hace 13 minutos
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Patrullera francés hace escala en Limón y abre nuevo capítulo de cooperación marítima

El sol apenas se asomaba sobre el Caribe costarricense cuando la patrullera francés “La Combatiente” atracó en el puerto de Limón, en el muelle Hernán Garrón Salazar.
No se trató de una escala cualquiera, pues la llegada de esta embarcación insignia de las Fuerzas Armadas francesas en la región, marcó un momento clave en el fortalecimiento de la cooperación entre Costa Rica y Francia en materia de seguridad marítima.
A bordo, marineros franceses listos para compartir conocimientos y experiencias con sus homólogos del Servicio Nacional de Guardacostas en el Caribe de Costa Rica.
En tierra, una comitiva de alto nivel se reunía para reafirmar compromisos bilaterales dentro del marco del Acuerdo de San José, instrumento internacional que busca frenar el narcotráfico y otras amenazas en altamar en la región Caribe.
El encuentro oficial tuvo lugar este viernes y contó con la participación del canciller costarricense, Dr. Arnoldo André, el viceministro de Unidades Especiales, Manuel Jiménez Steller, y el comandante Juan Carlos Alvarado, director general del Guardacostas.

Por parte de Francia, asistieron la embajadora Alexandra Bellayer-Roille y el vicealmirante Nicolas Lambropoulos, comandante superior de las Fuerzas Armadas Francesas en las Antillas, quien se encuentra de visita oficial en el país.
“Estamos aquí para reforzar una alianza que trasciende las fronteras, Francia está comprometida con la seguridad del Caribe, y Costa Rica es un socio clave en esta misión”, declaró el vicealmirante Lambropoulos, antes de iniciar una agenda que incluye visitas técnicas, ejercicios conjuntos y encuentros fraternales entre las dos fuerzas.
Durante su estancia en territorio costarricense, la tripulación de “La Combatiente” participará en entrenamientos operativos con el Guardacostas.

Además de actividades culturales y de integración,también está prevista una visita a la Academia Nacional de Guardacostas en Pococí, donde se explorará el modelo de formación costarricense y se profundizará en el rol estratégico de Francia en el Caribe.
Este gesto de cooperación no es aislado, se inscribe en una estrategia regional más amplia que apunta a mejorar la eficacia en la lucha contra el crimen organizado trasnacional, especialmente el tráfico de estupefacientes por vía marítima.
La visita del alto mando francés y la llegada del patrullero simbolizan mucho más que un protocolo diplomático.
Son señales claras de un compromiso compartido por un Caribe más seguro, donde la colaboración entre naciones es la primera línea de defensa.
Francia y Costa Rica, unidas por el mar, sellan así una nueva etapa de trabajo conjunto, navegando hacia una región más protegida y resiliente.