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El Movimiento Cahuita Unida lideró una manifestación en rechazo a la actual propuesta del Plan Regulador presentado por el Instituto Costarricense de Turismo (ICT), el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) y la Municipalidad de Talamanca para el año 2023.
Los manifestantes afirman que el plan costero propuesto tendrá un impacto devastador en el turismo local, afectará gravemente el suministro de agua y resultará en el desplazamiento de numerosas familias, transformando la vida de muchas personas.
La marcha, que contó con la participación de vecinos, se inició en el salón comunal de Cahuita y culminó en la sede de la Municipalidad de Talamanca. Los manifestantes expresaron su descontento con el plan regulador vigente y demandaron que se les involucre directamente en la formulación de un nuevo plan que sea más adecuado para su comunidad tribal y única.
"Exigimos un nuevo plan regulador formulado por nosotros y para nosotros, no uno impuesto", declaró con Valerie Rose, vecina de la comunidad.
Rose destacó que el plan presentado no tuvo en cuenta las necesidades y particularidades de su comunidad y que la falta de participación significativa de los ciudadanos en la elaboración del documento es inaceptable.
La falta de consulta y participación de la comunidad en la elaboración del plan regulatorio ha sido uno de los puntos más controvertidos para los manifestantes.
Andrea Mora, miembro de Cahuita Unida, señaló que la comunidad no fue informada ni consultada adecuadamente sobre los detalles del plan que afectará directamente sus vidas.
"Solicitamos al alcalde que suspenda la aprobación de este plan regulador, que anule las reuniones que se presentaron como informativas y que se nos incluya como partes interesadas. Necesitamos ser escuchados y tener voz en decisiones que afectarán nuestro futuro", enfatizó Mora.
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