La Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) desmanteló la antigua refinería ubicada en la terminal de Moín en Limón centro, esto tras la directriz de desarmar la vieja estructura girada por el presidente de esta institución, Juan Manuel Quesada, el pasado mes de junio.
Desde hace más de 11 años el país no refina petróleo, quedando en abandono, tuberías, estructuras metálicas, recipientes y equipos de medición, entre otras infraestructuras dedicada a esto.
“Hemos cumplido con desmantelar la antigua refinería, una decisión conveniente para la empresa, el país, nuestros trabajadores y para nuestra operación. A pesar de la resistencia, con ello dejamos atrás el fantasma de la refinadora que no refina”, comentó el presidente de RECOPE, Juan Manuel Quesada.
Quesada dijo también que “para esta decisión se consideraron los riesgos de acciones y el eventual colapso de la infraestructura, debido al mal estado en que se encontraba”
En este proceso de desmantelación participaron más de 18 personas especializadas en estos trabajos, entre las labores incluyó la desgasificación de tuberías para evitar algún incendio, también se recolectaron más de 300 toneladas de chatarra, el área liberada es de casi 10 mil metros cuadrados.
Además, Quesada contó que “el espacio será utilizado en proyectos de modernización a futuro que ayude a mejorar la competitividad de RECOPE”
También se logró recatar equipos en buen estado como bombas, compresores, válvulas, turbinas y motores, que podrían ser reutilizados entre terminales de RECOPE. Además, se recuperó el horno de crudo y chatarra que se podría rematar, los recursos recaudados durante este proceso serán devueltos mediante rebajas en las tarifas de combustibles a todos los costarricenses.
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