El “Pole dance” se abre terreno en medio de las críticas de algunos apegados a los estigmas que inundan la sociedad en la actualidad.
En Limón, esta práctica gana terreno poco a poco, de la mano de una academia que cada vez tiene más adeptos.
“Iríría Studio, nació con el permiso de la comunidad indígena, ya que quería darle una visibilidad a esta población y ayudar de una u otra manera. Mi mejor amiga es mi coach de Pole dance y es la que me motivó a hacer crecer la academia y como profesionales, después tuve la posibilidad de abrir la academia aquí en Limón, como ya tenía contactos y conocimiento de la zona, decidí que este era el mejor lugar para empezar Iríría Studio”, comentó Rolando Soto fundador del estudio.
De acuerdo con Soto, esta disciplina puede ser una herramienta que ayude en las problemáticas sociales que enfrenta la provincia.
“Limón aún tiene mucha problemática social en la cuál puedo ayudar, el Studio de Pole Iríría llega a limón para regalar un espacio seguro en donde se pueda sentir a gusto y cómodo, que sea un lugar en donde se pueda expresar, explorar emociones sin miedo, quiero dar a las personas mucho amor y aceptación propia, además mucha danza y comunicación con el cuerpo, quiero que la gente no vea la sensualidad como sexualidad y que también está bueno explorar esas partes”, explicó.
El joven radicado de Limón, oriundo de Naranjo, Alajuela, inició el amor por el baile hace 10 años, donde ha llevado grande trayectoria para poder incursionar esta disciplina en el cantón de Limón.
“Yo tengo de bailar 10 años, estuve en grupos de baile latinos y como artista escénico 6 años, mi experiencia más grande como artista fue trabajar en el elenco del parque diversiones, también he llevado clases de Jazz en el taller nacional de danza, tengo varios intructorados de pole dance, flexibilidad, ritmos latinos”, indicó Soto.
“El pole dance llegó a mi vida a cambiarla un giro 360, me llevó a un enfoque y me hizo crecer tanto emocional como profesionalmente hablando, en el pole trabajé muchas inseguridades que tenía y me di cuenta que los límites reales solo los pongo yo mismo”, agregó Rolando.
El oriundo de Naranjo, acogió sin duda el brindar todo lo que ha aprendido sobre el baile, trayendo a Iríría Studio, a todos los limonenses y no solo en el ámbito artístico sino ayudando, y aportando a otras comunidades.
Rolando quiere sacar de este proyecto el no poner estereotipos, que esto lo vean como un deporte y no sexualizar este ámbito.
“La gente está muy acostumbrada a ver el baile del tubo como algo sexual y aunque proviene mucho de su entorno a eso, hoy hacemos esta práctica como un deporte, un arte para expresarnos y otros logran para explorar su sensualidad y encontrarse desde esos puntos”, finalizó
Si es de su interés puede recibir esta técnica puede comunicarse al número telefónico: 6028-3222.
El horario de clases es de lunes a jueves de 5:00 p.m a 7:00 p.m
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