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Las autoridades del Ministerio de Seguridad Pública han anunciado el más grande y significativo golpe al narcotráfico internacional hasta la fecha en el marco de la Operación Soberanía, que ha estado en curso desde julio en la Terminal de Contenedores de Moín, Limón. En esta ocasión, se logró la incautación de 2.148 kilogramos de cocaína en dicha terminal portuaria.
El Ministro de Seguridad Pública, Mario Zamora Cordero, acompañado por el Viceministro de Seguridad, Manuel Jiménez, hizo este anuncio durante una conferencia de prensa realizada en las instalaciones del Servicio de Vigilancia Aérea en Alajuela, donde la droga fue trasladada desde la provincia de Limón.
Zamora enfatizó que este logro fue posible gracias al arduo trabajo de todos los cuerpos policiales de su ministerio destacados en la Terminal de Contenedores de Moín, liderados por la Policía de Control de Drogas.
Según el Ministro de Seguridad Pública, el decomiso tuvo lugar la tarde del sábado, cuando el personal policial detectó la droga en un contenedor que transportaba fruta fresca con destino al puerto de Amberes en Bélgica.
El contenedor pasó por los procedimientos habituales de escaneo y revisión, realizados en colaboración con todas las unidades de policía destacadas en la Terminal de Contenedores de Moín. La alarma se activó después de que los oficiales de inteligencia analizaran las imágenes del escáner y notaran irregularidades en la carga. La confirmación de sus sospechas se produjo cuando se inspeccionó el contenedor, lo que llevó a la activación del protocolo de sospecha de contaminación.
El caso se encuentra actualmente bajo investigación por parte de la Policía de Control de Drogas, y, por lo tanto, no se pueden proporcionar más detalles en esta etapa.
Desde que los cuerpos policiales del Ministerio de Seguridad Pública tomaron el control de la Terminal de Contenedores de Moín, se han logrado decomisar un total de 4.080 kilogramos de cocaína en estas instalaciones portuarias. El Ministro Zamora enfatizó que esta operación demuestra el compromiso del gobierno de Costa Rica de enfrentar y perseguir a las organizaciones criminales involucradas en el narcotráfico en el país.
